Fuente: Sprint Project
En la era digital, los hábitos de consumo han evolucionado enormemente y han creado una necesidad casi inmediata de satisfacción entre los consumidores. Por lo tanto, en tiempos normales, los compradores esperan que los productos que desean estén siempre disponibles y entregados en un tiempo récord. Según un estudio de OpinionWay, el tiempo de entrega es uno de los factores más importantes a los ojos de los consumidores franceses. Además, el 79% de los clientes desean beneficiarse del monitoreo en tiempo real de la entrega de sus paquetes. Esto no es sorprendente cuando se lee que el 62% de los encuestados testifica haber encontrado un problema de entrega, logística o producto en los últimos meses.
Tales expectativas son muy difíciles de satisfacer para los vendedores. Es por eso que los jugadores de la cadena de suministro deben dar el 100% para garantizar una entrega rápida y confiable. Afortunadamente, todos ellos pueden contar con el Internet de las Cosas (IoT) para facilitar su trabajo y garantizar el seguimiento de los productos, a lo largo de su viaje, a fin de garantizar una disponibilidad y entrega óptimas lo antes posible.
De hecho, IoT puede ayudar a mejorar la visibilidad y maximizar la eficiencia de la cadena de suministro, desde el almacén hasta el destino final.
Precisión en el inventario
Para seguir siendo competitivos, los revendedores deben poder satisfacer la creciente demanda de disponibilidad inmediata de productos y entrega rápida y confiable directamente a los consumidores. Las tiendas, tanto físicas como en línea, deben almacenar sus existencias, tanto dentro de sus tiendas como en almacenes, para no perder clientes. Sin embargo, lo que puede parecer obvio es mucho más fácil decirlo que hacerlo.
Para abordar este problema, los revendedores ahora pueden equiparse con sensores IoT capaces de proporcionar información valiosa sobre el estado de las existencias en la tienda y el almacén. Estos sensores detectan el peso en los estantes y pueden informar a los gerentes de las tiendas sobre la popularidad de ciertos artículos. Esto también ayuda a alertar a los equipos cuando los artículos deben reponerse en almacenes y reordenarse en tiendas. Del mismo modo, los gerentes pueden usar los datos recopilados por los sensores para analizar el tráfico de artículos con el fin de elaborar un inventario preciso de los productos que se venderán y evitar así pedidos excesivos, como desabastecimientos.
Esta aplicación de la tecnología IoT ya está vigente en tiendas como Amazon Go. Cuando los clientes retiran artículos del estante, un sensor de peso puede determinar qué artículo se ha eliminado, lo que permite a la tienda identificarlos. popular, pero también para saber lo que el cliente tiene que pagar.
Seguimiento preciso y monitorización de condición
Cuando los paquetes salen del almacén, los consumidores esperan que lleguen en las condiciones prometidas para la compra. No hace falta decir que entregar productos dañados nunca es algo bueno. Los productos se esperan dentro de un tiempo específico y en buenas condiciones, ya sea para revendedores o para clientes finales.
Sin embargo, normalmente, cuando un contenedor sale del almacén, es extremadamente difícil saber dónde está y si se está manejando correctamente. Una vez más, los dispositivos IoT proporcionan seguimiento y proporcionan datos valiosos como ubicación, temperatura, humedad, golpes e inclinación, proporcionando información sobre control de calidad y trazabilidad. Estos datos pueden ser útiles no solo para identificar errores de envío, sino también para dar a los vendedores la oportunidad de corregirlos ordenando nuevas existencias, evitando o limitando sorpresas desagradables para los clientes.
En el mundo industrial, esta tecnología de IoT ya está implementada por empresas de todo el mundo y les permite tener una visión precisa de la ruta y el estado de sus productos. Michelin y Airbus son dos ejemplos. El primero mejora la gestión de sus flujos intercontinentales, especialmente en el transporte marítimo, el segundo, mientras tanto, utiliza una solución de seguimiento para el transporte de repuestos aeronáuticos y otros componentes de una fábrica a otra, en todas partes el mundo.
Optimización de la ruta
Llevar los artículos a su destino final en perfectas condiciones es solo la mitad de la batalla, también deben entregarse a tiempo. Con muchas ciudades ya congestionadas con el tráfico, la entrega de paquetes a tiempo puede ser difícil.
Al colocar sensores IoT en la infraestructura clave de las ciudades, como semáforos o salas técnicas, los proveedores pueden acceder a los datos sobre las condiciones del tráfico y evitar las calles más congestionadas y, por lo tanto, ahorrar un tiempo precioso. Los datos recopilados también permiten planificar mejor las entregas de varios paquetes a una sola persona o a un punto de recolección central, reduciendo así el número de viajes.
En conclusión, al implementar soluciones de IoT en diferentes niveles, los vendedores, los expedidores, los proveedores y el personal del almacén pueden obtener acceso a datos valiosos que pueden ayudarlos a cumplir mejor las crecientes expectativas de sus clientes.
Sobre Sigfox
Sigfox es el iniciador de la red 0G y el proveedor líder mundial de soluciones de conectividad dedicadas a Internet de las Cosas (IoT). Su red internacional facilita la conexión de miles de millones de objetos a Internet, al tiempo que reduce el consumo de energía. El enfoque único de Sigfox de permitir que los dispositivos se comuniquen con la nube elimina las tres barreras principales para la adopción de IoT, que son el costo, el consumo de energía y la escalabilidad.
Hoy, la red Sigfox está disponible en más de 70 países y cubre a mil millones de personas. Con certificación ISO 9001 y basado en un vasto ecosistema de socios y actores principales en el IoT, Sigfox permite a las compañías evolucionar su modelo de negocio hacia nuevos servicios digitales, en áreas clave como Asset Tracking y la cadena de suministros. Fundada en 2010 por Ludovic Le Moan y Christophe Fourtet, la compañía tiene su sede en Francia y también tiene oficinas en Madrid, Munich, Boston, Dallas, San José, Dubai, Singapur, Sao Paulo y Tokio.